domingo, junio 18, 2006

El Rutinario

Me he mudado a El Rutinario. Por ahí nos vemos.

viernes, diciembre 17, 2004

escondite

¿Dónde se esconde el encanto de las letras, de los signos y símbolos con los cuales es posible jugar, articular y desarticular para, al final de cuentas, llegar a ninguna parte? Ayer estuve en el radio, en la XEJB, hablando sobre matemáticas; anteayer me entrevistaron para Mural, buscando el perfil de la pessoa que engendró el Café Scientifique Gdl. Hoy me tomaron la foto para esa entrevista en el restaurante del Camino Real. ¿Será que valen la pena las acciones que uno pueda lograr? A veces, me gustaría pensar que si. Sin embargo, me gustaría decir adiós a todo y dedicarme a las letras, a los números, a los sistemas y espacios matemáticos. Allá afuera, no hay más que frío y distracciones superfluas, vicisitudes extrañas por demasiado comunes, para perder la vida, gastar el tiempo, coagularse por dentro. Si es que hay un escondite para las letras, tendré que seguir buscando hasta encontrarlo. Y, si no lo encuentro, ¿qué?, ¿habrá valido la pena la búsqueda? Imposible saber. Ante la búsqueda, lo mejor es el disfrute de la misma.

jueves, diciembre 09, 2004

Letras y números

Sobre cualquier tema se puede hurgar en una novela, un ensayo, un poema. No así en las ciencias exactas, como la matemática, que trata un tema único desde un casi mismo enfoque, a excepción de diferencia de herramientas dentro de la misma rama. Parece que escribir letras y números es un camino opuesto, una forma de pensar paralela y probabilisticamente divergente, aunque, dentro de los casos raros, excepcionales, si se llegue a dar la convergencia. La geometría nos pone de frente a un mundo que es necesario visualizar, uno de líneas, puntos y planos, figuras que se parecen o guardan ciertas características en común, no del todo aparentes, en ciertas ocasiones. Moverse de un punto a otro en el espacio, en el tiempo, en la imaginación…


miércoles, diciembre 08, 2004

De que sirve

He tomado la opción del pobre: la enfermedad como forma de viaje. J se va el lunes a Londres, Europa y Barcelona. Dos ciudades y un continente; una vida para ser vivida, aprendiendo al máximo, sin detenerse a pensar las consecuencias. Pero, ¿de qué vale no pensar si en el camino hacemos daño a nuestro ambiente? Apenas unos cuantos días para mi cumpleaños y me siento tan solo, tan rodeado de gente querida pero sin amor. Reconocimientos cuando lo único que busco es un abrazo cálido, acogedor, sin rechazos ni mendrugos. Un beso no dado es un soplo de vida que se va.

domingo, diciembre 05, 2004

Intento por escribir en estado de ebriedad

He comenzado a creer en la novela como una forma para subsistir. Estoy demasiado borracho para poder escribir. Las letras se amontonan una encima de otra, formando conexiones sin sentidos, estructuras informes.

Hoy descubrí varias historias de interés en cuanto a mi vida personal. Sigo sin poder escribir, demasiado borracho para continuar. Los dedos equivocan su destino final. Las historias: sobre la intelectualidad de mi abuelo y los años y vidas frustradas de ciertas personas.

Será necesario comenzar una historia que aborde los temas de la familia, desde mi nacimiento o, acaso, antes de él, hasta la posible muerte del personaje, cualquiera que esta pueda ser. Me rindo, no puedo escribir más.

viernes, diciembre 03, 2004

Escrito antes de ser escrito

Una historia se escribe un sinfín de veces antes de ser contada en el papel. La elección del personaje, la voz, el tiempo, el espacio, condiciones necesarias para que se deje ver el punto de vista del autor, la opinión acerca de la realidad y sus vericuetos más inalcanzables, mediante artilugios para contar sin necesidad de decir la idea explícitamente. Entonces, contar historias es como no hablar, quedarse callado, desarmando la voz propia en otra, la del personaje que ha sido creado, o que ya existía, para permitir la introspección y la timidez del autor. Uno y otro se necesitan, incluso comienza a dudarse sobre quién sueña a quién, si la mariposa o Li Po.

He comenzado a escribir la historia –poema–, que acompañará a la exhibición de fotos en Hostal Guadalajara, al lado de Elis Mason, para el 12 de diciembre. Considero que una expo debe contener, más que una muestra de arte, un tema a tratar. Yo escojo el Aeropuerto Charles de Gaulle, donde pasé 9 días, como motivo para hablar de la soledad, el viaje, la lentitud, la velocidad, Pessoa,… una muestra de 6 fotografías que, en línea, cuenten una historia de principio a fin mientras que, de manera individual, también tengan significado. La fractalidad del mundo, el todo mayor que la suma de sus partes, la teoría holográfica del mundo, donde un pedazo de materia contiene la información entera del universo. Así, un sentimiento de una persona -pessoa– particularísima, puede encerrar de cierta manera, el sentimiento de todas las personas. El Libro del Desasosiego servirá como pretexto para la intertextualidad.

En el error está la certeza

¿Cómo es posible que le tema al error, si la literatura no es más que eso? Dada una realidad, el escritor la hace propia, viéndola desde una vida ajena. El que narra no es el que vive: el personaje deambula por una realidad alterna, donde todo es posible, mientras quepa en la mente del escritor. Si la enfermedad es el viaje de los pobres, la escritura es el de los solitarios, los acostumbrados a mirar al mundo a través de una hoja de papel, en la soledad del calor de la lámpara de escritorio sobre su hombro izquierdo. Signos y señales de un mundo posible, de una realidad alcanzable. En el error está la certeza.